ZELA NEGRA ALE

Volví a la carga, luego de bastante tiempo de introspección y por supuesto aprendizaje sobre cervezas.

Un tiempo atrás, recibí directamente de su creador, un par de muestras de ZELA, la producción de esta cerveza es por tandas y en una de esas, tuve el agrado de comprarla. Lo que más me llama la atención, es la sinceridad en una cerveza y al ser denominada "rústica", esta cerveza logra prevenir al consimidor de cierta manera, podemos prever que no estamos frente a un producto fino o elegante sino a algo un poco más ordinario (en el buen sentido de la palabra). Con esta premisa y todas las ganas, amenizo mi partido de futbol por tv, apoyando a mi equipo favorito y probando esta cervecita.

Cerveza Zela, está elaborada y envasada por Nano Cervecería Rancaguína, en la Región de O'Higgins, que corresponde a la VI Región de Chile, 4.7º aprox. de contenido alcohólico y botella de 330 cc., una cerveza 100% natural y sin aditivos.

Al servir en vaso, nos muestra una espuma beige, que sube de forma abundante, con grandes burbujas y manifiesta un alto nivel de carbonatación, esta espuma se va disipando rápidamente.

El color de esta cerveza es un marrón bien oscuro y al observar el trasluz, puedo ver rastros de la sedimentación que pasó de la botella al vaso (servida como corresponde) y una gasificación bien lograda.

Su aroma es a café, algo metalizado y su sabor es bastante picante, achichado pero agradable, conserva el amargor típico de cervezas oscuras pero en un adecuado nivel que no satura ni hostiga, deja la saliva bastante espesa y la boca completamente impregnada con un sabor tostado.

Su carácter rústico se nota desde el principio, la etiqueta a medio pegar, la espuma de poca retención y burbujas grandes y dispersas y su sabor picante, además el desprendimiento de sedimentación.

Sin embargo puedo dar fé de una cerveza sincera que calza muy bien con lo descrito en su etiqueta, sin disfraces, así que no me llevé sorpresas.

Como toda cerveza negra, hay que tener un gusto bien marcado para tomarla frecuentemente, pero de todas maneras podría tomarme otra.

Los últimos sorbos entregan un sabor más dulce que no había sentido, tiene más cuerpo que varias de similares características y un nivel acertado para disfrutar responsablemente.

Mi conclusión: Rústicamente aceptable.